Las previsiones de diversos organismos destacan que, de aquí al año 2100, el nivel del mar podría aumentar entre 75 y 85 cm. Un dato alarmante si se tiene en cuenta que, en los últimos 23 años, sólo ha subido 8 cm. Pero otros expertos, como los de la NASA, son aún más pesimistas: 'Un aumento de tres metros es posible... e inevitable. Lo que no sabemos es si se producirá en un siglo o más adelante'. De momento, esto es lo que puede pasar en los próximos años...
El litoral español se verá afectado por el cambio climático: el pronóstico indica que gran parte de las costas actuales desaparecerán y los pueblos inmediatos se verán afectados, obligando a cientos de personas a dejar sus casas. Es un proceso lento, en el que, además del deshielo de los glaciares,provocado por el aumento de las temperaturas que hacen que se derrita el hielo y aumente el agua de los océanos.
Influyen factores como los super-temporales -grandes tormentas marítimas, serán cada vez más frecuentes e intensas-, los vientos -'empujarán' el agua del mar hacia las costas- y la altura - territorios costeros más llanos, se verán más afectados.
Comunidad Valenciana
Un informe solicitado por el Gobierno valenciano revela que, en 2050, el mar se 'comerá' entre 14 y 58 metros de franja costera, y hasta más de 150 para 2100. Las zonas más afectadas serán El Saler, la Almenara, Norte y Grao de Borriana, La Llosa, la playa de Nules, Moncofa... En la ciudad de Valencia, la Ciudad de las Artes y las Ciencias sufrirá daños importantes a causa de los temporales marinos y el Parque de la Albufera, quedará sumergido por el agua del mar.
Andalucía
El Centro Andaluz de Medio Ambiente considera que, a lo largo del siglo XXI, el nivel del mar en las costas andaluzas subirá 1 metro... afectando a todas las edificaciones que se encuentren, ahora mismo, a menos de 80 metros de la playa. En Almería, el Parque Natural Cabo de Gata-Níjar -uno de los pocos paisajes vírgenes del Mediterráneo- quedará sumergido bajo el mar. Lo mismo ocurrirá en Huelva, con el Parque Nacional de Doñana, en el estuario del río Guadiaro, en Cádiz, o en las marismas del Guadalquivir, en Cádiz, Sevilla y Huelva. Estudios más alarmantes amplían las inundaciones en prácticamente la totalidad de Cádiz.