20 de marzo de 2020

Día Mundial del Gorrión

El 20 de marzo se celebra en todo el mundo el Día Mundial del Gorrión (World Sparrow Day) una iniciativa de la Nature Forever Society de la India y organizaciones conservacionistas de diversos países, muchas de ellas miembros de BirdLife International, para llamar la atención sobre la situación de la especie, cuya población sufre un notorio declive, especialmente en las ciudades.

La población española de gorriones ha disminuido un 11% de media desde 1998 y hasta un 14% en algunas áreas del país. Es notable su declive en muchas ciudades del mundo, hasta el punto de que en el centro de Londres o Praga ha sido noticia que apenas es posible verlos ya.

Son diversas las causas que originan la caída los gorriones y no hay un estudio concluyente que apunte a un único motivo. En el campo, su deterioro se corresponde con el que también padecen especies habituales como la golondrina, la tórtola o la perdiz, y tiene que ver con el abandono de las prácticas agroganaderas tradicionales y el excesivo uso de productos químicos.

En las ciudades influye, sin ninguna duda, que el urbanismo moderno y las nuevas prácticas de jardinería no ayudan a su recuperación, pues no proporcionan lugares de anidación ni fuentes de comida para ellos.

El gorrión es “un indicador del estado de la biodiversidad en nuestro entorno” y “garantizar su supervivencia es sinónimo de calidad de vida”. 


Los gorriones tienen ahora menos lugares para anidar en las ciudades. Los edificios actuales no tienen agujeros o tejas donde hacer su nido y tampoco abundan los árboles viejos donde encontrar una oquedad. Además, las nuevas modas de arquitectura han sustituido los espacios públicos tradicionales, con plantas y árboles, por las llamadas ‘plazas duras’ diseñadas con exceso de cemento y apenas tierra o áreas verdes. 

Las prácticas de jardinería pública tampoco ayudan a lo gorriones. El exceso de adecentamiento de jardines, cortando la hierba continuamente o haciendo tratamientos para acabar con pequeños insectos deja a los gorriones sin fuentes de alimentación. 

Son pequeños detalles que pueden pasar inadvertidos al ciudadano pero que tienen influencia sobre las aves y otros elementos de la fauna urbana. “Las aves son un indicador de la calidad del medio ambiente y lo que le ocurre a ellas también nos afecta a nosotros”, afirma Asun Ruiz, directora ejecutiva de SEO/BirdLife. “Una ciudad con abundancia y variedad de aves es también una buen lugar para que las personas podamos vivir.

Cuando hablamos de gorriones solemos referirnos al abundante gorrión común (Passer domesticus), pero deberíamos recordar que en realidad son varias las especies de gorriones que tenemos en España. Pinchando sobre la imagen, Gabriel Martín, biólogo y ornitólogo de SEO/BirdLife, nos explica cuáles son y da algunos consejos para aprender identificarlos.                                     Fuente: SEO BirdLife

1 de marzo de 2020

España, víctima del cambio climático

España se encuentra entre las regiones "críticas" en Europa por el cambio climático, según se desprende del último informe de la Agencia Europea del Medio Ambiente publicado este miércoles 25 de enero. Aunque no la cita específicamente, la AEMA señala que el sur y sudeste de Europa, así como las zonas costeras y las llanuras de inundación, se encuentran entre los "puntos críticos" del calentamiento del planeta en el continente. Además, las previsiones de costes de los daños asociados al cambio climático alcanzan un importe máximo en la región mediterránea. Todas estas observaciones afectan a España.
Estos puntos críticos está previsto que padezcan el mayor número de impactos adversos. El trabajo, titulado 'Cambio climático, impactos y vulnerabilidad en Europa 2016', afirma que todas las regiones europeas son vulnerables al cambio climático, aunque precisa que algunas de ellas experimentarán más repercusiones negativas que otras. Concretamente, se refiere al sur y sudeste europeo como regiones que están experimentando ya un "acusado aumento" de las temperaturas máximas y una consiguiente disminución de las precipitaciones y del caudal de los ríos.
Esto supone, asimismo, un incremento del riesgo de sequías más intensas, una pérdida de rendimiento de los cultivos, una pérdida de biodiversidad y un aumento de los incendios forestales. "Está previsto que las olas de calor más frecuentes y los cambios en la distribución de enfermedades infecciosas sensibles al cambio climático se traduzcan en un aumento de los riesgos para la salud y el bienestar humanos", añade la Agencia.
Mientras, las zonas costeras y las llanuras de inundación de Europa occidental se exponen a un mayor riesgo de inundaciones derivado del aumento del nivel del mar y a un posible aumento de los fenómenos tormentosos. "El cambio climático también está dando lugar a cambios importantes en los ecosistemas marinos, como resultado de la acidificación de los océanos, el calentamiento y la proliferación de zonas muertas carentes de oxígeno", alerta.
Asimismo, el informe advierte de que los ecosistemas y las actividades humanas en el Ártico se verán "fuertemente" afectados por el aumento particularmente rápido de las temperaturas del aire y del mar y el derretimiento consiguiente del hielo terrestre y marino.
Aunque señala que ciertas regiones también podrían experimentar repercusiones positivas, como la mejora de las condiciones para la agricultura en ciertas zonas de Europa septentrional, la Agencia concluye que la mayoría de regiones y sectores se verá afectada negativamente.